PREBODA EN OPORTO

Salu, llegó a Oporto para apredender portugués, lo que iban a ser unos meses se convirtió en 9 años, no porque conociese a Mauricio, ya que el destino tardó tres años en juntar sus vidas, sino porque se enamoró de la ciudad, que para ella, es la más bonita del mundo. 

Ellos se conocieron en un bar de rock de madrugada, charlando se les hizo de día, intercambiaron los números y a los pocos días el telefóno de Salu sonó, era Mauricio… ahí comenzó su historia. Lo que no sabía es que él, en pocos días se mudaría a Inglaterra, a pesar de que se conocían de muy poco, Salu no dudó en dejarlo todo y marcharse con él. A veces las corazonadas funcionan, y lo que empieza como una locura, continúa con una preciosa historia de amor. Inglaterra les acogió durante cuatro años, ahora por fin, pueden disfrutar de Oporto.

Por el momento, no tienen planes de boda, cuando se enteraron por las redes sociales que Fotógrafo Artístico iba a estar en Portugal haciendo el preboda a otra pareja, no dudaron en contactar con nosotros y contratar el reportaje de pareja urban. Les apetecía mucho tener un reportaje de fotos en Oporto, la ciudad que tan feliz les hace. Para nosotros fue una suerte poder conocer la ciudad de su mano.  Su reportaje de fotos comenzó en la Estación de Sao Bento, y podemos decir que es una de las estaciones más hermosas que hayamos conocido. Continuamos caminando a la Catedral Sé do Oporto, hasta que nuestros pasos nos llevaron por sus callejuelas, tejados en los que crece la hierba,  la ropa tendida en los balcones, las plantas en las puertas, sin duda es una ciudad de contrastes. Te sorprende con sus pintadas, graffitis y como no, por sus preciosos azulejos que no te dejaran indiferentes en fachadas como la de la Capilla de las Almas. Pasear por la Ribeira, llena de vida, de música, de su gente, sus gaviotas…y disfrutar de las vistas de la ciudad desde los diferentes miradores. Ver a Salu y Mauricio, comerse a besos y reirse juntos con esa complicidad, es enarmorarse un poquito también de ellos y por supuesto enamorarse de Oporto hasta las trancas!

O amor é importante 

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