Carmen y Álvaro desprenden buen rollo en cada segundo. Tienen un montón de energía y en su sesión no nos paramos de reir con ellos ni un momento. Nos seguían por instagram y cuando se enteraron que estábamos haciendo sesiones intimas no dudaron en contactar con nosotros. Querían tener unas fotos hot, pero por supuesto siendo ellos mismos. Nos dijeron que querían ponerse sus pijamas de koala y comenzamos la sesión de fotos así, tirados en el sofá, mientras veían una peli y comían palomitas. La tranquilidad duró poco, enseguida, comenzaron las bromas, y las gamberradas… el momento cama, con sus fotos sexys, por supuesto que llegó, pero no antes sin echar una guerra de almohadas y montones de cosquillas.
¿Qué os parece? ¿Cómo te imaginas tu sesión de fotos íntimas? Llenas de fuego, o más romanticona…
Escríbenos y preparamos algo juntos!